miércoles, 12 de octubre de 2016

Muy pocos hogares españoles son eficientes energéticamente


Sólo el 16% de las viviendas en España obtiene una calificación entre A y D en su certificado energético. El resto recibe una calificación de E, F o G. Además, solo un 1% obtiene la máxima calificación A y hasta un 42% de casas de nueva construcción tiene un certificado E o inferior.
El pasado 1 de junio se cumplieron tres años desde que se convirtió en obligatoria la emisión del certificado de eficiencia energética en la compraventa y alquiler de viviendas y edificios. Para su obtención, el sistema de evaluación establece siete niveles de certificados, de la A a la G, dependiendo del nivel de excelencia del comportamiento energético de la vivienda.
La eficiencia energética tiene incidencia directa en el gasto total destinado a climatizar una vivienda, del que un 70% equivale a calefacción, un 20% a calentar el agua y el 10% restante a refrigeración.
Una vivienda que cuente con la categoría A ahorraría hasta un 90% de la energía consumida respecto a una catalogada con el nivel G. Una de clase B en torno al 70% menos; y la clase C, un 35% menos. Para incentivar la concienciación de la ciudadanía, desde el Gobierno se han propuesto descuentos de hasta un 20% en el IBI de los edificios dependiendo de su grado de eficiencia energética.
Hay que recordar que si se publicitase la venta o alquiler de un piso sin el certificado energético correspondiente, el vendedor o arrendatario se enfrentaría a una multa de hasta 600 euros. Además, falsear la información o actuar como agente certificador sin contar con la titulación se castiga con una multa de hasta 6.000 euros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario